La
doctora Alix Agudelo, decana encargada del Instituto Pedagógico de
Caracas (IPC) perteneciente a la UPEL, informó que el concesionario que
estaba prestando servicio de comedor en este Instituto cerró sus
puertas debido a los altos costos para la preparación de la bandeja
escolar y la dificultad para obtener los insumos para su elaboración.
La
decana explicó que la escasez de alimentos en el país y los altos
precios de los rubros alimenticios obligó al concesionario a disminuir
la cantidad de proteínas, carbohidratos o frutas que se ofrecían en el
plato. “Ante esta situación le pedimos que hiciera la denuncia y nos
obligamos a suspender temporalmente el comedor, pues el plato tiene un
costo inferior a lo que cuesta una empanada, es decir 113 bolívares”.
Agudelo
señaló que la medida de cierre del comedor del IPC afecta a más de 1
mil 600 estudiantes de bajos recursos económicos y ocasiona deserción
escolar. “Esta semana pudimos observar que ha mermado
la asistencia a las aulas desde el cierre del comedor el pasado 29 de
febrero. Existen estudiantes que se nos quedan con una o dos materias
por ir al comedor, porque sencillamente garantizan su plato de comida.
Nosotros tenemos una población estudiantil con muchas necesidades y la
consecuencia que se nos presenta al cerrar el comedor es la deserción.
En lo que va de año hemos visto que muchos estudiantes han tenido que
retirar materia por la situación económica, ya que tienen que trabajar
para ayudar a su familia y naturalmente eso está afectando”.
La
decana recordó que el Estado tiene la obligación de garantizar la
educación gratuita a los estudiantes. Indicó que una de las formas de
ayudar a esta población a continuar sus estudios superiores es
asegurarles un óptimo servicio de comedor y aumentar las becas y
preparadurías.
Protestan los estudiantes
La
representante estudiantil ante el Consejo Universitario, bachiller Isva
Vera, también denunció la grave crisis que enfrentan los estudiantes
upelistas con la suspensión de sus comedores: “Sentimos que la
universidad está siendo vulnerada, la universidad venezolana está siendo
vejada. Una vez más el gobierno nacional se está burlando de nosotros.
No podemos seguir aguantando que el gobierno siga ahorcando a las
universidades. La primera acción que vamos a tomar es que vamos a ir a
la OPSU a pedir que se evalúe el precio del plato de comedor”.
La
representante estudiantil indicó que en la Reunión del Consejo
Directivo de la Aproupel entregó un Manifiesto de Protesta por el cierre
del comedor estudiantil, en cuyo petitorio los estudiantes hacen un
llamado a las autoridades académicas para que garanticen el cumplimiento
del Artículo 122 de la Ley de Universidades, a los fines de que asuman
una postura ante los Organismos del Estado en defensa de los derechos de
sus estudiantes. Asimismo, solicitan la colaboración de los gobiernos y
co-gobiernos estudiantiles de las universidades públicas del país a
sumarse a una protesta activa desde sus casas de estudios sin la
necesidad de la suspensión de actividades.
Entre otros puntos, el documento demanda:
*El aumento del plato de alimentación diaria a Bs. 800 por estudiante.
*La igualdad alimentaria relativa a la infraestructura de los comedores y los servicios que prestan.
*El respeto a la autonomía universitaria, según el artículo 109 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
*El
cumplimiento del artículo 99 de la Constitución y del artículo 2 de la
Ley Orgánica de Educación, relativos al presupuesto para la educación y
las providencias estudiantiles.
Especial: Neida Prieto