Acto de proclamación del Día Internacional de la Mujer en la Organización de Naciones Unidas año 1975.
Estudios
recientes aseguran que del salario de las mujeres en Venezuela 90% se
utiliza para comida y el restante en servicios, afectando su calidad de
vida.
Una
mirada a los esfuerzos que diariamente hacen las trabajadoras de la
UPEL para sacar adelante a sus familias, permite ver el enorme trabajo
que afronta este sector de la población.
(Especial) Nicol Pérez/ Angley Vivas.
Se
celebra una año más el Día Internacional de la Mujer, fecha
institucionalizada por la Organización de Naciones Unidas para reconocer
la lucha de la mujer por lograr su participación en la sociedad y su desarrollo íntegro como persona.
En
Venezuela esta fecha cobra particular importancia, por cuanto diversos
estudios han revelado que la situación económica y social que vive el
país afecta con mayor fuerza a la mujer.
En este sentido, un informe titulado “Mujeres al límite”,
realizado por organizaciones no Gubernamentales (ONG) y reseñado por el
portal informativo Efecto Cocuyo, expone cómo este sector de la
población padece la violación de sus derechos humanos fundamentales. El
estudio indica que las mujeres son las que se ven más afectadas por la
carencia y la carestía de los alimentos, consumen menos cantidad de
comida y de nutrientes, tienen menor acceso a la salud, son las
responsables del cuidado de sus hijos en los centros de salud y de la
búsqueda de los medicamentos que ellos necesitan y además enfrentan la
violencia de género, entre otros aspectos señalados en el informe.
Asimismo, un artículo publicado en el portal web Contrapunto,
señala que el presidente de la encuestadora Datos, Luis Maturén, afirmó
que del salario de las mujeres en Venezuela 90% se utiliza para
comida y el restante en servicios, lo cual ha cambiado su patrón de
consumo y ha afectado su calidad de vida.
Estas
investigaciones revelan las difíciles vivencias de la mujer venezolana
en una sociedad que muestra un continuo deterioro. En este contexto y en
ocasión de celebrarse hoy 8 de marzo tan importante día, es oportuno
conocer cuál es el principal reto que afrontan las mujeres que laboran
en la UPEL.
Yoleth
Suárez, secretaria ejecutiva del Despacho de la Secretaría de la UPEL,
destacó la capacidad de la mujer de reinveintarse ante las adversidades y
que se configura en la única forma de sobrevivir. "Frente al alto costo
de la vida y la hiperinflación que vive nuestro país, la creatividad en
nosotras se ha desarrollado para poder obtener más recursos, a través
de emprendimientos, diseñando nuevas recetas para la comida diaria,
entre otras cosas, lo que no significa conformarse sino que se convierte
en una forma de lucha para no dejarse vencer ante tales males”
expresó.
Por
su parte, la coordinadora nacional de la Unidad de Servicio y Apoyo a
las Comunidades Educativas (USACE) de la Institución, Reina León, afirmó
que la situación actual de las féminas no es fácil, siendo el único
sostén de muchas familias en el país y teniendo que cumplir con todos
los roles en el hogar, por lo que manifestó que lo importante es no
perder “su afecto y amor por sus hijos, por quienes le rodean y en las
cosas que hace”, lo cual es fácilmente vulnerado en cuantiosas
ocasiones.
Para
la directora encargada del Instituto Pedagógico Rural “Gervasio Rubio”,
María Trinidad García, la mujer venezolana es una heroína al poder
superar tantas adversidades como “el ver emigrar a sus hijos en busca de
un mejor porvenir” y además motivarse a sí misma a seguir y a su
familia a lograr, en cierta medida, el bienestar de los que la rodean.
“En muchos escenarios estamos siendo afectadas, sin embargo tenemos la
capacidad de salir victoriosas y en los tiempos venideros, confiadas de
que sean mejores, estaremos mejor capacitadas” aseguró.
La
directora de Desarrollo y Bienestar Estudiantil de la Casa de Estudios,
Silvia Ribot, aseguró que otro reto que se le suma a las venezolanas es
el de conocerse a sí misma para afrontar las crisis con más entereza,
hecho que considera es cultural, ya que el malestar que generan agentes
externos a su entorno no puede ser controlados por ellas y, en
consecuencia, “no deben dejar que las afecte emocionalmente y afecte su
organismo”.
El
valor, empuje y responsabilidad de las trabajadoras upelistas en la
Venezuela de hoy reafirman el heroísmo de la mujer venezolana.
Con información de :